Ayer 3ipunt quiso dar voz a todas las compañeras de la empresa, por ello se realizó una mesa redonda dónde se contaron los inicios de cada una, se dieron a conocer algunos referentes y se debatió la igualdad de género en el ámbito del trabajo, los clientes y las entrevistas en el mundo tecnológico, entre otros temas.
Ante todo, no podemos empezar este escrito sin presentaros a las maravillosas mujeres y mujeres desarrolladoras web, desarrolladoras en pro de la educación a distancia que ofrece Moodle, diseñadoras web, y más que forman el “elenco” de 3ipunt en la mesa redonda; Amanda del Valle, Mercè Noguer, Elena Barrios, Meri Reves, Yolanda Cano, Alba Illan, Tamara Piqueras, Raquel Villán, Xènia Inglés, Txell Llorach, Eli Hernández, Ari Fiol, Laia Canet, Sara Badia y Carla Casalots. ¡Gracias a todas por formar parte!
A modo resumen, de todas las conclusiones y temas interesantísimos que se han tratado en el acto, os queremos compartir unas palabras que hemos escrito y definen lo que pensamos.
Estamos a 8 de marzo de 2022, y desgraciadamente, seguimos reivindicando el día de la mujer. Y usamos la palabra desgraciadamente, porque ojalá no hiciera falta. Con la mesa redonda de hoy, no esperamos cambiar el mundo, pues es una tarea complicada, pero si por lo menos os hemos hecho reflexionar un poco, ya damos por cumplido nuestro objetivo.
Hemos hablado del mundo de la tecnología, pero hay más realidades que no deben ser olvidadas. Y, sobre todo, mucha diversidad dentro de las mujeres, y todas sois igual de importantes. Que a ninguna os hagan sentir que sois de segunda.
Esperamos de todo corazón, que nos ayudéis. Sabemos que la lucha, lamentablemente, nos pertenece, pero la responsabilidad es colectiva. Y muchas veces no es necesario hacer cambios a lo grande ni pretender lo imposible, empecemos por nosotras mismas y nuestro entorno, poco a poco: Reflexionemos. Cambiemos discursos caducos que se han vuelto verdad de tanto repetirlos. Salgamos a demostrar que muchos de ellos no son ciertos, cambiemos el lenguaje, la manera como nos relacionamos y todos los micromachismos que tenemos interiorizados. Evolucionemos y ayudemos a los que no lo ven, para que poco a poco abran los ojos.
Como dijo Angela Davis, no se trata de aceptar las cosas que no podemos cambiar, sino de cambiar las cosas que no podemos aceptar.
Más allá de la colectividad, que a estas alturas es más que obvia. O de la sororidad, tan necesaria. Cabe decir que el cambio depende de la individualidad de cada uno, de una toma de decisiones profunda. Debemos interiorizarlo y empezar a cambiarlo.
En conclusión, se trata de empatizar, de abrir la mente y sobre todo de desaprender. Os animamos a hacerlo para que no hayan más ochos de marzo…
Y, sobre todo, que no sea solo hoy. Todos los días, siempre, hasta que sea tan verdad que no haga falta reivindicarlo.